El secreto para conseguir un buen movimiento con este señuelo es forzar que se sumerja lo mas posible para que la acción su acción se vuelva mas realista. Levanta la punta de la caña, recupera lentamente y consigue que el Maria Ammis empiece a moverse surfeando la superficie enseñando la cabeza de esa manera que vuelve locos a las lubinas.
Es un buen señuelo para zonas poco profundas y rocosas.El sistema magnético de transferencia de peso le da mucha estabilidad al nadar y mejora realmente su comportamiento en lance las jornadas con viento.
Peso: 18 gramos
Longitud: 120mm